Suele pasar que lo que tenemos más a mano en nuestras ciudades y pueblos, y precisamente por estar tan cerca, muchas veces presumimos de ello y sin embargo lo desconocemos.
Seguro que somos muchos los que aún no hemos encontrado tiempo de visitar un museo, monumento, biblioteca, espacio singular, etc. del que hablan en todas las guías de viaje, que están llenos de viajeros que vienen del quinto pino, y que nosotros no conocemos a pesar de vivir practicamente al lado; tengo amigos cacereños que no conocen los Palacios de la Ciudad Monumental ( Patrimonio de la Humanidad), el museo árabe, el barrio judío, el aljibe, Trujillo, Mérida, La Vera, Las Hurdes, y sin embargo han viajado a India, Rusia, el Caribe o Nueva York .
Yo soy un gran amante de Mi Tierra y la conozco bien, aunque siempre hay cosas que seguir añadiendo. Sin embargo, desde que empecé a correr y sobre todo en estos ultimos días que estoy trabajando los desniveles grandes también estoy conociendo lugares preciosos donde no había puesto el pie antes, a pesar de estar a 20 minutos de mi casa, probablemente porque no se puede ir en coche o porque no están en ningún lugar de paso hacia destinos habituales, son esos parajes a los que llegamos corriendo por los caminos.
Me encanta buscar en el Google Earth caminos y seguirlos en el ordenador, para después buscarlos corriendo. Ayer subí por uno de estos caminos a unos Riscos que llamamos la Sierrilla, desde un sendero que parte de un lugar por el que paso casi a diario y en el que nunca había caído, es un recorrido para correr y andar porque los desniveles son grandes pero al llegar arriba tienes una nueva visión de la zona donde vives, y me gusto tanto que cuando ya iba de vuelta y a pesar del calor tuve que volver a subir por ese sendero. Y seguro que se repetirá muchas más veces. Acabé el domingo con 15 kms. y la semana con 59, muchos de ellos con buenos desniveles, así que se me están poniendo las piernas duras de subir y los tobillos fuertes de bajar, y a pesar de que voy cómodo de pulsaciones, los ritmos siguen siendo aceptables, la buena forma no se quiere marchar. Todo será que más adelante la eche de menos.